Capitulo
13
Entrevista con Ernesto
Mientras escribía esta
historia, a cada momento, me iba quedando más anonadado. He iba entendiendo, el porqué es tan difícil
probar un seguimiento. Pero para poder
seguir escribiendo esta historia, necesitaba más información. Y donde coger esta información. Pues desde el mismo origen, de Ernesto, el
Vigilado.
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Así que ni corto ni perezoso,
me dirigí a su casa, sabiendo que aun estaba dentro del proceso de
seguimiento. Pero quería informarle de
lo avanzado que llevaba su tercer libro.
Y que necesitaba más información para poder acabar, el tercer libro.
Ernesto, me abrió la puerta y accedí a su domicilio. La visión era más demacrada de la que
recordaba hacía nueve meses, cuando me contó su historia. Nada más entrar, me enseño, donde estaba
ubicada la microcamara. Me enseño el
hueco, realizado para tener línea visual con la microcamara. Que como observé, había sido improvisado y
su función no era la de filtrar luz, pues ya tenía otra ventana mucho más
grande en la parte central. Y
ciertamente se veía, la microcamara instalada en el techo, enfocada hacia el
balcón. Aunque desde la primera vez, que
vine, ya habían cambiado a las personas que vivían en su interior, de una
familia de dos a otra de cuatro personas.
Aclarándome, que la importancia del piso franco no es de quien la ocupa
si son policía o colaboradores no policiales.
Sino el hecho de la colocación de la microcamara o la reiteración en la
vigilancia a ojo desde las ventanas anexas.
Y sobre todo recalcaba la libertad que tienen, la policía que le
investigaba. Pues desde la denuncia de
su hecho y la gravedad de este y aun seguía esperando. Siendo conscientes tanto la judicial de su
colocación, como el vigilado. Y que no fuese
quitada. Daba el nivel de seguridad que
tenían, en que la denuncia no iba a prosperar.
Como si pensasen, que ya que ha grabado la cámara, y la ha pillado. Pues la
dejamos, ya nos inventaremos luego lo que queramos o desviaremos la atención,
no va a ser capaz de demostrar nada. Mucha
seguridad. Que lo da el acceso a…. Claro, que pensando, pensando la pregunta
sería: ¿Quien va a informar al juez, un policía civil, guardia nacional o un
metropolitano? Con lo que pueden
contarle lo que quieran, en el caso de que sea necesario pueden engañarlos. Pues Ernesto, entendía, que no debe ser
fácil engañar a un juez, otra cosa es que se dejasen engañar, por los policías. Pero como todo, el engaño a un individuo o
varios, solo depende de la cantidad de personas de su alrededor que estén
dispuestos a ello. Por ello, ninguno
estamos cubiertos, de ser engañados durante la vida. El problema no es ser engañado, sino que te
des cuenta del
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